Alfredo Ramírez Bedolla, indiferente ante decenas de damnificados por la exposición en conjunto habitacional en Lázaro Cárdenas

agenciaesquema.com

Lázaro Cárdenas, Michoacán, 24 de enero del 2025.-El Gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, ha sido indiferente ante decenas de damnificados por la explosión en un conjunto habitacional de esta ciudad, que dejó tres integrantes de una familia muertos.

Los afectados se han quedado sin vivienda, el edificio tendrá que ser demolido, nadie puede regresar a sus departamentos que un día fueron sus hogares.

No han podido rescatar nada, pero por fortuna, la sociedad les ha abastecido de alimentos y víveres porque hay no sólo adultos sino niños, los afectados tienen que pedir permiso a los vecinos para entrar a sus baños.
El gobernador anda de gira, en España, con su coordinadora de Comunicación Social, Sayín Villavicencio y el esposo de esta, que no trabaja en gobierno y que es un “aviador” con una paginilla de internet, pero que por ser pareja de la funcionaria se fue a disfrutar del dinero del erario público.

Sin embargo, no les importó que tres personas murieran en esta tragedia, el gobernador también se llevó a una funcionaria de nombre Aned, dicen que es muy, pero muy cercana al mandatario, mientras que las familias agravadas por esta tragedia viven las inclemencias de la desigualdad.

Tampoco los políticos que se han enriquecido con dinero del pueblo se han presentado, ni mucho menos los empresarios millonarios, dueños de las empresas mineras que están en este Puerto Internacional se han desprendido de un solo peso para ayudar a los afectados.

Están prácticamente solos, a no ser de la gente de esta ciudad de Lázaro Cárdenas y sus tenencias que son los únicos, si, los únicos que han sacado hasta de sus alcancías para llevarles algo de comer a los hermanos que sufren el día de hoy, que se han quedado sin su patrimonio, que no han sido escuchados.

Pero dentro de todo lo que el indiferente gobernador y los políticos han sido con los agraviados, es digno de reconocer a los MILITARES, a los MARINOS, a los POLICÍAS, a los PARAMÉDICOS, que se han partido el alma para ayudar removiendo escombros y todo lo que se pueda necesitar de ellos.