POR ALBERTO LINERO
Miércoles 8 de octubre de 2025.- La vida no siempre sale como queremos. Todos hemos pasado por momentos en los que la derrota toca a nuestra puerta y sentimos que perdemos algo importante: una oportunidad, un sueño, una relación, un trabajo.
Pero hoy quiero invitarte a que mires esas pérdidas de una manera diferente, no como golpes que te derriban, sino como momentos reveladores que te permiten descubrir lo más valioso que llevas dentro: tu poder de elegir quién quieres ser después del fracaso. Aprender a perder significa aceptar que tu vida no depende únicamente del éxito o del aplauso externo, más bien es valiosa por lo que decides hacer cuando te encuentras frente al vacío existencial que aparece después de cada derrota.
No eres tus logros ni tus fracasos; por el contrario, eres un ser único, amado por Dios, capaz de redefinir su camino en cada instante. El fracaso no te define, pero sí te revela.
Hoy te invito a que veas cada derrota como una oportunidad única de replantearte, de conocerte más profundamente, de saber de qué estás hecho.
Cuando pierdes, tienes en tus manos el poder de reinventarte, de elegir nuevos caminos, nuevas posibilidades. Te invito a entender que, aunque las cosas no salgan como las tenías planeadas pueden ser el inicio del desarrollo de tu facultad para elegir el siguiente paso.
El fracaso, entonces, se convierte en una invitación a decidir, a vivir con valentía desde lo que realmente deseas y no desde lo que esperan los demás.
ORO POR TI
Padre Dios, bendice a esta persona que hoy lee estas palabras. Ayúdala a elegir con valentía el camino de su verdadera libertad. Amén
TAREA DEL DÍA
Anota como un fracaso te dio una nueva oportunidad.