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Morelia, Michoacán, 20 de julio del 2025.-Eder Israel A. B., tercer presunto implicado en el homicidio de Carlos Eduardo C. M., estudiante de la Normal de Tiripetío, tenencia de esta capital michoacana, fue recluido en el Cereso tras ser capturado por policías de la Fiscalía General del Estado.
Eder Israel enfrenta a la justicia por el delito de homicidio calificado, cometido en agravio de Carlos Eduardo C. M., según obra en la Causa penal número 268/2025, por lo que, la policía de investigación de la FGE le cumplimentó una orden de aprehensión decretada el 26 de junio del 2025, por el Juez de Control y Enjuiciamiento del Sistema de Justicia Penal Acusatorio y Oral de la Región Morelia.
Las investigaciones del personal operativo de la Unidad de Homicidios, revelan que el 13 de abril del 2025 alrededor de las 09:00 horas, Carlos Eduardo se encontraba en su dormitorio en la Normal Rural de Tiripetío, cuando llegó uno de sus compañeros de nombre Julio César, quien le pidió que salieran de la institución educativa ya que algunas personas querían hablar con él.
Así lo hicieron y se dirigieron a un bar ubicado a unas cuadras de la Normal en donde estuvieron platicando con un sujeto de apodo “El Loco” y otro llamado “El Apa”, sin embargo, al joven Carlos Eduardo no lo volvieron a ver regresar a su escuela, por lo que los familiares al no saber de él pidieron el apoyo de las autoridades en donde denunciaron su desaparición.
Fue el 18 de abril cuando lo localizaron sin vida en una zona cerril del municipio de Lagunillas, por lo que, las pesquisas de la Unidad de Homicidios pudieron llegar al esclarecimiento del caso al confirmar la probable responsabilidad de Álvaro M. D., alias “El Loco”, Julio César y Eder Israel, por lo que, el Ministerio Público competente solicitó las respectivas órdenes de aprehensión, mismas que fueron cumplimentadas en tiempo y forma por la Unidad para la cumplimentación de Mandamientos Judiciales.
Por lo anterior, los tres sujetos ya vinculados a proceso, esperan el curso de su situación jurídica y de acuerdo a especialistas en materia penal, podrían alcanzar penas de hasta 50 años de prisión o más, aunque esto, en forma oficial lo determinará el Juez que ordenó la captura de los probables responsables.
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