- Pero se les olvidó o no quisieron recordar a César Bautista, su escolta
agenciaesquema.com
Morelia, Michoacán, 29 de septiembre del 2025.- El pasado 16 de septiembre se cumplieron 20 años del cobarde asesinato de Rogelio Zarazúa, quien fuera director de Seguridad Pública del Estado.
Sus familiares, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, su gabinete y las autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán le rindieron un homenaje, privado, en silencio, sin invitación para nadie más.
Sin embargo, se olvidaron del elemento César Bautista, quien era su escolta y quien también cayó abatido a tiros cuando intentó defender la vida de su jefe, Rogelio Zarazúa.
Rogelio Zarazúa como mando policial desmanteló varios laboratorios de droga durante el gobierno de Lázaro Cárdenas Batel, lo que le llevó a recibir amenazas de narcotraficantes.
El día 16 de septiembre, después del desfile, decidió, acompañado de su esposa, ir a comer a un restaurant en la zona de Las Américas, hasta donde llegaron los sicarios y acabaron con su vida y la del elemento César Bautista, a quien también debieron homenajear, pero no quisieron o lo pasaron por alto tanto el gobernador como las autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública.
César Bautista, era hijo de Mario Bautista, un hombre que también entregó su vida en el área de seguridad como director de Seguridad Pública, y que el día de hoy, es recordado por sus amigos de los medios y por la sociedad, por el trabajo decidido que realizó en beneficio de los michoacanos.