Mira un poquito más allá

A veces creemos que ya entendimos todo con solo ver una cara, escuchar una frase o leer un mensaje rápido. Pero la verdad es que muchas veces, lo que pensamos que vimos… no es toda la historia. Es solo una parte. Y si queremos realmente entender a los demás —y a nosotros mismos— hay que mirar un poquito más allá.

No todo es lo que parece. Esa persona que viste seria puede estar pasando un mal día. Ese comentario cortante puede venir de alguien que está cargando con algo que no te contó. Y tu querido lector de estas tareas: ¿cuántas veces te sentiste mal y nadie lo notó porque “parecías bien”?

No te quedes con la primera impresión. Tómate un momento más. Pregunta, escucha de verdad, presta atención. Lo mismo con las situaciones: a veces algo parece un problema, pero con otra mirada, termina siendo una oportunidad. O un aprendizaje. O simplemente, algo que no era tan grave como parecía.

También es importante que te mires a ti con más profundidad. No te definas por tus errores, ni por lo que alguien más dijo de ti. Eres mucho más que eso. Eres todo lo que viviste, lo que aprendiste, lo que intentás cada día, incluso cuando nadie lo ve.

Así que cuando sientas que estás juzgando, criticando, o incluso dándote con todo a ti mismo… para. Respira profundamente. Y trata de ver un poquito más allá. Porque detrás de todo lo que vemos, siempre hay algo más. Algo que vale la pena entender, algo que enseña, algo que nos conecta.

No se trata de complicarse la vida, sino de vivirla con un poco más de conciencia y menos automático.
Mirar más allá no es hacer magia, es simplemente aprender a ver mejor.
Y cuando lo haces, empiezas a vivir con más empatía, con más calma… y con más verdad.

Bendecido jueves.

Redacción Agencia Esquema

Ver todas las publicaciones

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *